lunes, 14 de diciembre de 2015

Cosas que saber sobre los yesos y férulas

Como ya hemos comentado en otra entrada (si queréis verla solo tenéis que pinchar aquí), las fracturas de huesos en niños son algo muy común y el tratamiento es la colocación de férulas o yesos. Aquí os muestro algunas cosas que debéis saber.

Los yesos y férulas se utilizan para la inmovilización de las fractura y permitir de este modo que se consoliden bien los huesos, es decir que se suelden. Una férula es, dicho de una manera sencilla, la mitad de un yeso, por ejemplo si se trata de una fractura de radio, la férula se colocará solo en la cara posterior del antebrazo, dejando la anterior sin yeso, solo con algodón. Esta se sujeta al miembro que se debe inmovilizar mediante vendas. Las férulas se suelen usar en aquellos casos en los que haya riesgo de hinchazón o alguna herida a la que se deban hacer curas. Esto es una férula:

 Colocación de yeso o férulas: en el caso del yeso se pone una capa de algodón y a continuación se moja un tipo de venda ya impregnada de yeso, que al contacto con el agua permite su manejo y moldeamiento. Importante que quede una capa gruesa en el talón para que al apoyar no se deforme ni se rompa . En el caso de las férulas la capa de algodón es doble para evitar los roces que puedan producir las esquinas del molde de yeso. A continuación de mide la longitud del miembro y se moja una venda de esa medida, moldeándola y acomodándola bien a la forma de la extremidad en la que se va a colocar, para que sea efectiva. Una vez hecho esto se venda todo el miembro para fijar bien la férula.

  • El yeso debe mantenerse limpio y seco, ya que el agua lo deforma, se debe tener especial cuidado con esto en las duchas de los niños y por eso se recomienda poner una bolsa en la zona donde esté colocado el yeso. 
  • Las primeras 48 horas no se debe apoyar ya que es lo que tarda el yeso en fraguar, de esta manera se evitan las deformaciones. 
  • No se debe utilizar nada para rascar por dentro del yeso, como reglas o lápices, ya que pueden quedarse dentro y producir heridas. 
  • Se deben mover los dedos para evitar la rigidez articular y favorecer la circulación. 
  • Si se observa hormigueo, coloración azulada de los dedos cambios de temperatura o cambios en el aspecto como ampollas debe acudirse a urgencias. 


En cuanto a la extracción, si se trata de una férula, solo hay que cortar la venda por la zona donde no hay yeso y ya se puede sacar. En el caso del yeso hay que usar una sierra especial que no corta la piel, su funcionamiento consiste en una vibración capaz de rasgar la capa de yeso, el paciente solo sentirá un cosquilleo en su piel. Se hace un corte a longitudinal a lo largo del yeso y de esta manera se puede retirar. 

Al retirar cualquiera de los dos, la piel se verá escamosa y amarillenta, pero es algo normal debido al tiempo que ha pasado la piel encerrada y no se ha podido renovar. Bastará con lavarla y echarle crema hidratante durante varios días, con un masaje desde la zona distal a la proximal para activar la circulación. Seguramente también se verá la pierna o el brazo más pequeño, ya que el músculo ha menguado por el encarcelamiento al que fue sometido. Con un poco de ejercicio leve volverá a tu tamaño original.

Por último os dejo un vídeo para que podáis ver la colocación de un yeso:




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